Hoy estoy reportando desde el frío piso en el que temporalmente duermo. Vine al DF a visitar a mi mejor amiga, la muy desgraciada está por mudarse a Cancún y yo con este clima tan airoso, tan otoñal. La envidio, no les voy a mentir. Me acuerdo tanto de mi novio, quien me reclamó por haberme mudado a un lugar tan frío (Toluca) "vengo de un verano alemán de 10ºC para llegar a un delicioso verano mexicano de 8ºC". Bueno, yo qué chingados iba a saber que el cambio de clima se iba a sentir tan cabrón. Chulada de 30ºC que hay en GDL y yo que tanto me quejé. Cosas de la vida o, mejor dicho, inconformidades de la vida!!
La novedad de la semana: regreso a Guadalajara a más tardar en 15 días. Aclaro, ésto no tiene nada que ver con el clima (las chamarras son muy buenas aliadas en estas circunstancias) sino que las cosas ya se acomodaron de otra forma. De una mejor, una más padre.
Les voy a chismear también dos cosas: el viernes conocí a una fiel seguidora del blog de Melpomene, tan así que bebí cerveza con ella y ahora somos amiguis-amiguis; la otra, uno de mis amigos de la universidad está en tal reality-show-musical-de-la-televisora-del-ajusco. No les voy a decir quién, JA!
Mañana me espera una maravillosa y matutina torta de tamal. Estoy emocionada, jaja, nunca he comido tortas de tamal (merezco un golpe, lo sé). No voy a prometer contarles qué tan chingona estuvo mi experiencia, porque luego ni vengo, ni les platico, ni nada, ya ven que soy bien pinche mala anfitriona a últimas fechas :D
... pero los quiero. Aun.
PD. Le mandamos un beso a la Pelusa porque fue su cumpleaños. Muah, muah.